El nombre vulgar de esta planta proviene
del uso que le dieron los romanos para realizar hechizos de amor, ya que Venus
era la diosa relacionada con el amor, la belleza y la fertilidad.
Tradicionalmente ha tenido también un uso como diurético (el zumo de hojas y
tallos machacados) y como vulneraria para curar heridas y llagas (en uso
externo, una vez retirada la piel de las hojas). Se distribuye por la Europa
mediterránea, Portugal, Irlanda, Gran Bretaña y Bulgaria. Prefiere crecer en
lugares húmedos y sombreados, sobre muros, grietas de rocas y tejados. Florece
de abril a agosto
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